Pablo Aragüés (Zaragoza, 1982) está terminando de dar los últimos coletazos de la que será su tercera película, ‘Para entrar a vivir’. Una comedia con toques de fantasía y terror sobre una pareja y su nueva casa. El director y guionista acaba de lanzar el trailer.

Un inmueble en una céntrica calle de Zaragoza es el principal escenario de esta película rodada el pasado otoño. Para entrar a vivir’ está protagonizada por Bárbara Goenaga y Gorka Otxoa y cuenta con la participación de Luisa Gavasa, Kira Miró y Jorge Usón.

Acabas de estrenar el trailer de tu tercera película, ¿qué puedes contarnos sobre ella? 

Que es una comedia con tintes de terror sobre algo que nos encantaría a todos, encontrar la casa ideal. Sólo que a qué precio…

Aunque la película tiene tintes fantásticos, ¿cuánto hay de autobiográfico o de vivencias de pareja? Y ¿cuáles han sido las referencias?

Todo nace de una casa en la que viví en Madrid, había sido sede de los masones de Madrid y tenía una puerta secreta, símbolos masónicos, etc. La idea de que una casa así pudiese tener vida propia fue el origen de la historia. La semilla del diablo ha sido mi referencia más clara, aunque hay otras películas como Poltergeist o Bitelchús que también me influyeron.

Sin desvelarnos demasiado, ¿cuáles son los interrogantes que se plantean y sobre los que trata de profundizar? 

¿Necesitamos todo los que deseamos? La vorágine consumista en la que vivimos día a día y, sobre todo, la locura en torno al tema inmboliario (encontrar una casa, tener una casa…) son los principales.

En el casting de tus películas siempre destacan caras conocidas, ¿qué buscas en los actores? ¿Cúal fue el criterio de selección para tus dos protagonistas?

Quería un actor de comedia para él y una actriz que trabajase más en dramas para ella. Además, se sumaba que Bárbara y Gorka se conocen desde los 10 años, por lo que era un punto extra de darle confianza a la pareja. No era lo mismo que se conociesen el primer día de ensayos.

Pros y contras de rodar en una sola localización 

Pros que tienes todo a mano. Contras, todos los del mundo… Que el espacio a veces se hace asfixiante, que tienes que llevar todo muy bien pensado para poner la cámara, que siempre estás esforzándote porque el espacio no sea aburrido… pero eso es parte del reto y para eso hacemos cine.

Cuando estabais grabando, ¿pasaron cosas sobrenaturales?

Hubo un momento como en mi corto ‘Las 5 muertes de Ibrahim Gonsález’, que con eso queda todo dicho y quien no sepa de lo que hablo, que le eche un ojo.

En relación a la evolución de tu carrera, ¿cómo llevas el paso del tiempo y de la industria cinematográfica? 

Siempre tengo la sensación de empezar de nuevo con cada nuevo proyecto. Da igual lo que hayas hecho antes, siempre tienes que venderte de cero y cada nuevo rodaje es una aventura a ciegas. Por otro lado, que me siente a escribir una película de la cual soy el responsable en todos los procesos y que al final, de mi casa sale el master que se va a Netflix, me parece alucinante. 

Bárbara Goenaga y Gorka Otxoa en ‘Para entrar a vivir’.