Álex de la Iglesia sigue siendo uno de los directores más originales de nuestro cine. Esta premisa la vuelve a demostrar en ‘Las brujas de Zugarramurdi’ donde el vizcaino da rienda suelta a su imaginación y mezcla la huida de un atraco –con unos peculiares asaltadores– con la historia de un pueblo poblado por unas vengativas –y divertidas– brujas.

Hugo Silva y Mario Casas dan vida a dos jóvenes que buscan dinero fácil para comenzar una nueva vida y dejar atrás a sus mujeres. Por el otro lado, Carmen Maura y Terele Pávez son las encargadas de encarnar a dos brujas dispuestas a todo para conservar su secreto.

Un film divertido que no deja tiempo a la relajación y en el que durante los 112 minutos del metraje no paran de ocurrir cosas –algunas más desternillantes que otras–. Es una nueva muestra del sentido del humor de De la Iglesia que siempre apuesta por realizar la película que quiere hacer sin preocuparle lo disparatado que sea su argumento.

La película se pudo ver fuera de la muestra oficial del Festival de San Sebastián sirviendo de homenaje a uno de los premios Donostia de esta edición, Carmen Maura.

En esta ocasión, Terele Pávez le gana la partida a los actores más jóvenes dejando muestra de su calidad interpretativa y dejando constancia de que De la Iglesia saca lo mejor de ella en sus films. Efectos especiales y buenos gags para disfrutar durante dos horas.